
Ubicada en el Condado de Pennington, en el Estado de Dakota del Sur, Rapid City es la ciudad cabecera desde donde parten la mayoría de los tours hacia Black Hills (donde se encuentra el Monte Rushmore) y el Parque Nacional Badlands. Una vez que hayas conocido estos dos emblemáticos lugares y si dispones de más días, no te pierdas la oportunidad de conocer el Memorial a Caballo Loco (Crazy Horse Memorial), el Custer State Park y el Monumento Nacional Devils Tower.
El Parque Nacional Badlands fue testigo de las terribles peleas que tuvieron que librar las comunidades originarias de los Lakota contra los colonos que, en búsqueda de nuevas tierras y oro comenzaron a invadir la región. Las 98.700 hectáreas que hoy ocupa el Parque Nacional Badlands ( declarado Parque Nacional por el Congreso de los Estados Unidos de Norteamérica en 1978), protegen además del paisaje, cientos de especies animales como el bisonte y rarezas vegetales típicas de la región. Aquí también se encuentra un área llamada Pine Ridge Indian Reservation que es sumamente interesante de conocer pues aquí viven los descendientes del mítico Caballo Loco.
Pine Ridge es una reserva de habitantes Oglala-Lakota dentro de la cual existen 3 secciones: la Stronghold Unit o área sagrada de los Lakota, la unidad Norte (el Muro) y la Palmer Creek Unit. Como siempre solemos decir, somos viajeros del viento y lamentablemente no pudimos conocer toda la reserva y mucho menos el Parque Nacional entero, que demanda un mínimo de tres días como para poder decir que lo hemos recorrido, pero aquí te vamos a contar parte de nuestra expedición. La parte norte de Pine Ridge es la más preparada para recibir al turismo, con centro de visitantes, senderos perfectamente demarcados y una espectacular área de servicios que no deja nada librado a la improvisación. A lo largo del recorrido bajo un cielo extremadamente limpio y azul, podrás ver antílopes americanos saltando entre los pastizales y pequeños remolinos de viento trazando figuras de polvo a la vera del camino. El paisaje es sobrecogedor y si sumamos lo que vemos, con imágenes de nuestra infancia cuando veíamos la serie “La Casa en la Pradera” con la Familia Ingalls, el cuadro está completo.
Al día siguiente nos dirigimos al Parque Nacional Black Hills, pues no podríamos irnos de los Estados Unidos de Norteamérica sin una foto del Monte Rushmore. Ubicado aproximadamente a unos 39 kms de Rapid City, el ingreso fue muy fácil de encontrar. Los cuatro rostros de los presidentes allí esculpidos representan los principales momentos de la creación del país: la fundación (Washington), madurez (Jefferson), desarrollo (Roosevelt) y preservación (Lincoln). El centro de visitantes te proveerá de toda la información necesaria que no es poca. Y luego un día muy completo, con nuestra foto “yo estuve aquí” del Monte Rushmore en nuestra cámara, retornamos a Rapid City porque aún nos quedaban varias estatuas de presidentes por fotografiar. Si bien lo dejamos para lo último, no es menos importante contarte que Rapid City es la única ciudad norteamericana que posee decenas de estatuas de bronce apostadas en cada esquina. Cada una representa a un presidente norteamericano en tamaño real.